{"id":5838,"date":"2022-04-20T15:58:45","date_gmt":"2022-04-20T20:58:45","guid":{"rendered":"https:\/\/aspaen.edu.co\/?p=5838"},"modified":"2024-11-21T06:34:28","modified_gmt":"2024-11-21T11:34:28","slug":"peleas-entre-hermanos","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/aspaen.edu.co\/2022\/04\/20\/peleas-entre-hermanos\/","title":{"rendered":"Peleas entre hermanos"},"content":{"rendered":"\t\t
Si los padres enumeran las causas que provocan las peleas entre sus hijos<\/b> pueden convertir este simple pasatiempo en un ejercicio mental extenuante y sin fin.<\/p>\n
El listado de motivos es, sin exagerar, infinito: la televisi\u00f3n, el asiento del auto, las notas del colegio, la ropa, los regalos, el ba\u00f1o, los juguetes, la pieza, el timbre de la casa, la comida, los l\u00e1pices, la luz de la habitaci\u00f3n, los deportes, etc\u00e9tera. En resumen, todo puede convertirse en el ojo del hurac\u00e1n para que los hermanos se peleen<\/b>.<\/p>\n
Para las familias preocupadas por los gritos y golpes de sus hijos va este mensaje: es absolutamente normal que los hermanos peleen. Lo raro ser\u00eda que no lo hicieran. Sin embargo, esto no significa que los padres deban permanecer indiferentes ante las peleas de sus hijos<\/a>. Sobre todo porque lo que est\u00e1 en juego es la armon\u00eda de las relaciones familiares y la psiquis de los adultos.<\/p>\n Mucho se ha repetido que los pap\u00e1s no pueden meterse en medio de la pelea ni menos tomar partido. Eso es cierto. Pero s\u00ed deben intervenir en los momentos de calma, marcando la cancha y poniendo los l\u00edmites muy claros. Esto por un motivo fundamental: la familia es la mejor escuela de humanidad y compa\u00f1erismo. <\/p>\n Situaciones tan cotidianas, pero a la vez tan complejas como “\u00bfPor qu\u00e9 \u00e9l se sienta siempre al lado del pap\u00e1?, \u00bfpor qu\u00e9 tengo que ordenar yo, si jug\u00f3 ella tambi\u00e9n?, \u00bfpor qu\u00e9 no le puedo pegar si \u00e9l me peg\u00f3 primero?”, entregan al ni\u00f1o experiencias de vida que luego lo ayudar\u00e1n a ser buen amigo, a tener una relaci\u00f3n de pareja sana y a su vez, a formar una familia feliz.<\/p>\n Pero aprender a convivir no es f\u00e1cil. Sobre todo porque generalmente se debe pasar primero por el conflicto.<\/p>\n Las peleas entre hermanos se producen desde temprana edad. Hay que tener presente que en los niveles de agresividad influye un factor gen\u00e9tico. Cada ni\u00f1o es una persona particular y diferente de los otros, y nace con determinado temperamento. En el ser humano la agresividad, adem\u00e1s, es un motor que toma diferentes v\u00edas. En gran medida, depende de los padres canalizarlo hacia los juegos o el estudio.<\/p>\n Existen dos motivos que llevan las peleas al interior de la familia.<\/p>\n Si analizamos algunas de las caracter\u00edsticas de la etapa 7 a 12 a\u00f1os podremos explicarnos mejor las razones de estas peleas.<\/p>\n Los especialistas aseguran que las peleas son el term\u00f3metro de la paciencia de la madre o del adulto que est\u00e9 a cargo de esos ni\u00f1os. A menor paciencia, m\u00e1s peleas y viceversa. Es como un c\u00edrculo vicioso. Las mam\u00e1s con un umbral de tolerancia muy baja a las peleas se ponen cada vez m\u00e1s autoritarias, m\u00e1s sancionadoras y sus hijos pelear\u00e1n m\u00e1s. Y eso por una raz\u00f3n muy simple, pero dif\u00edcil de aceptar: las peleas no se pueden extinguir s\u00f3lo con una prohibici\u00f3n. S\u00ed moderar y encauzar.<\/p>\n Una salida adecuada es estimular otra actividad, organizar alg\u00fan juego. A esta edad los ni\u00f1os piden ideas para jugar, luego se desenvuelven solos, pero si no hay un adulto a cargo, que de vez en cuando gu\u00ede el juego, lo m\u00e1s seguro es que el asunto termine mal.<\/p>\n Tambi\u00e9n es importante que los pap\u00e1s aprendan a tolerar las diferencias. Cada hijo es \u00fanico y lo l\u00f3gico es que sus gustos y pareceres sean distintos. En esa convivencia habr\u00e1n transacciones, discusiones y roces que deben ser aceptados. Querer encuadrarlos a todos dentro de un mismo molde provocar\u00eda frustraciones y … m\u00e1s peleas.<\/p>\n Sin embargo, todo tiene un l\u00edmite. Si el nivel de peleas existente en la casa produce deterioro en las relaciones, esos padres deben intervenir m\u00e1s que r\u00e1pido y pedir ayuda especializada en caso necesario.<\/p>\n Una pelea es m\u00e1s o menos grave dependiendo de:<\/p>\n En otras palabras, calma, sagacidad y claridad cuando empiezan los gritos y pu\u00f1etes.<\/p>\nEL OTRO ES UN RIVAL<\/h4>\n
\n
En este contexto, el hermano siempre ser\u00e1 visto como un opositor, alguien que provoca un sentimiento de ambivalencia que oscila entre el amor y el odio. Esto se explica porque por su cabeza circulan muchas fantas\u00edas respecto al amor de sus padres; generalmente imagina que sus pap\u00e1s quieren m\u00e1s al otro. Por eso cada ni\u00f1o debe sentir que tiene un hueco seguro en la familia y los padres deben evitar las comparaciones, y la tendencia a tratarlos a todos como si fuesen iguales: eso intensifica las rabias. Por el contrario, hay que reconocerles personalmente a cada uno sus talentos, celebrar en forma individual sus gracias y darse tiempo para conversar a solas con ellos por separado. \u00a1Aunque sean diez hijos!<\/li>\n
Una de las etapas de mayores agresiones es entre los 7 y 12 a\u00f1os, indican los psic\u00f3logos, precisamente porque es el per\u00edodo donde nacen los juegos en equipo y buscan socios. Los juegos del el\u00e1stico, los shows, el f\u00fatbol, son ocasi\u00f3n de entretenci\u00f3n y tambi\u00e9n de peleas. Por esto mismo, las peleas son m\u00e1s frecuentes entre hermanos de edades similares.<\/li>\n<\/ul>\n\n
A esta edad el ni\u00f1o ve las cosas desde su punto de vista. Es incapaz de analizar en abstracto y menos de colocarse en el lugar del otro.<\/li>\n
Como una forma de adquirir seguridad, el ni\u00f1o busca demostrarse a s\u00ed y a los dem\u00e1s su capacidad. Aparece la competencia con sus pares y las consiguientes actitudes: molestar, hacer rabiar, elegir \u00e9l lo que quiere y no ceder.<\/li>\n
En estos a\u00f1os los ni\u00f1os tienen adem\u00e1s una autocr\u00edtica muy baja y su percepci\u00f3n es muy subjetiva. Defienden a ultranza su punto de vista y siempre creen que tienen la raz\u00f3n. Por ello sienten muchas veces que los padres son injustos y que prefieren al hermano.<\/li>\n
Los hijos en esta etapa adem\u00e1s de sentirse capaces, quieren ser aut\u00f3nomos y hacer las cosas a su manera. Por eso no compiten con los adultos ni con los hermanos mucho m\u00e1s chicos, sino con el hermano que le pone la barrera que es el m\u00e1s cercano a \u00e9l en edad.<\/li>\n
Esta actitud es cl\u00e1sica. El que gana lo demuestra, ostenta el triunfo. Al mostrar p\u00fablicamente la debilidad del hermano, se siente superior. El derrotado queda irritado, propenso al conflicto. Lo m\u00e1s seguro es que busque su venganza.<\/li>\n<\/ul>\n\u00bfQu\u00e9 deben hacer los padres para manejar peleas entre hermanos de forma efectiva?<\/h4>\n
\n
El puede demostrar sus capacidades por otras v\u00edas. Por ejemplo, si un hijo se saca un 6 de promedio y el hermano un 4,5, no hacer comparaciones. Al que tiene notas inferiores estimularlo por sus logros y tareas bien hechas y no esperar a que se saque un seis para alabarlo.<\/li>\n
En la familia debe predominar el cari\u00f1o, el contacto entre padres e hijos. Que exista un sentimiento de amor <\/a>evidente. S\u00f3lo as\u00ed brotan confesiones verdaderas.<\/li>\n
Es muy importante que los padres incentiven el uso del lenguaje en los hijos para que se puedan verbalizar las emociones. As\u00ed se ayuda a no acumular rencores. Se van moldeando las peleas y se puede reflexionar respecto de lo que sucedi\u00f3 y por qu\u00e9 sucedi\u00f3. El ideal es que despu\u00e9s de producido un “round” los adultos llamen a los involucrados y que cada uno d\u00e9 su versi\u00f3n. Es importante escuchar y atender antes que Impartir un castigo indiscriminado.<\/li>\n
Los adultos pueden ayudar a que sus hijos se conozcan a s\u00ed mismos, comprendan mejor sus puntos d\u00e9biles y aprendan a manejarlos. El di\u00e1logo<\/a>, eso s\u00ed, debe ser concreto, aterrizado. Es muy positivo contarles las peleas y problemas que ese pap\u00e1 o mam\u00e1 tuvieron cuando chicos.<\/li>\n
Por normales que parezcan no se deben convertir en h\u00e1bito. Y aqu\u00ed lo clave es ser justos. No siempre es f\u00e1cil saber qui\u00e9n comenz\u00f3 y como la agresi\u00f3n es una espiral, todos los que pelean salen perjudicados. Por ejemplo, si se pelea por ver un programa, se acaba la televisi\u00f3n. Por el hecho de pelear, ambos pierden el objeto.<\/li>\n<\/ul>\nHAY UN L\u00cdMITE<\/h4>\n
\n
LO IMPORTANTE ES PREVENIR<\/h4>\n
\n
UNA ACTITUD ACERTADA<\/h4>\n
\n
NO OLVIDAR<\/h4>\n
\n
Ellos pensar\u00e1n: estudio = castigo.<\/li>\n<\/ul>\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t